Antes de "The Kings of the World", la última característica de la escritora y directora colombiana Laura Mora, nos inserta en las bulliciosas calles de Medellín, donde los adolescentes ejercen machetes para protegerse, una foto de un caballo blanco apropiado para cuentos de hadas introduce la atmósfera de ensueño de este fábrico fábrica sobre los cinco adolescentes de las calles que se niegan a la humanidad básica.
Sin hogar y sin familia de sangre para protegerlos, las almas jóvenes a la vanguardia de este drama social electrizante se defienden por sí mismas en un entorno urbano arenoso. Su único consuelo proviene del afecto fraternal que se muestran el uno al otro. Ese estado, atrapado entre la ternura y la violencia mientras navegan por una realidad inhóspita, define la energía visceral de "los reyes del mundo", la entrada más reciente del Oscar de Colombia.
El líder del grupo, Rá de 19 años (Carlos Andrés Castañeda), acaba de enterarse de que la tierra que su abuela fue desalojada de muchos años en el pasado finalmente le han sido devueltos, el único heredero, como parte de las políticas de restitución de tierras del gobierno. Como Rá, Castañeda exuda un aire de inocencia envuelto en determinación. Heroicamente, no es amargado la dureza que enfrenta, sus ojos grandes y expresivos iluminan un camino hacia adelante.
Ecstatic to finally have a place to call home, where no one can look down on him, Rá embarks on a perilous trip to claim his piece of the world with his band of ride-or-dies: Sere (Davison Florez), a loyal ally with a hand disability, Winny (Brahian Acevedo), the youngest but also the wildest, Nano (Cristian Campaña), a quiet Black Colombian kid, and Culebro (Cristian David Duque), un antagonista en constante conflicto con Rá. A través de sus argumentos, podemos inferir que mientras los dos se levantaron juntos, no están relacionados.
Todos los actores primerizos encontrados por Mora en vecindarios desfavorecidos, el elenco irradia una comprensión empírica del anhelo de la aceptación de sus personajes. El hecho de que el vínculo en la pantalla de los adolescentes se lea tan convincentemente en las cicatrices de batalla compartidas, el apoyo emocional y las demostraciones físicas de cuidado mutuo valida las elecciones y los métodos de formas de rendimiento del director, cuyo debut, "Killing Jesus", una pieza semiautobiográfica inspirada por el asesinato de su padre, también presentó jóvenes no propios en los papeles principales.
Primero en bicicleta, luego a pie, el traicionero viaje a través de montañas, pequeñas ciudades y mucha vegetación enfrentarán a los niños con personas para quienes su mera existencia significa un inconveniente. A pesar de su comportamiento educado y deferencia a sus mayores, los niños se encuentran constantemente con desdén y agresión. Por lo tanto, sus circunstancias materialmente precarias parecen molestarlos mucho menos que darse cuenta de que sus vidas son de importancia minúscula para la mayoría de las personas. Al final, no todos llegarán a su destino final.
Sin embargo, Mora, y la coguionista Maria Camila Arias, también muestran a Rá y la pandilla encontrando amabilidad en los brazos de otras personas que, como ellos, han sido consideradas desechables por la sociedad. Primero, una mujer transgénero que trabaja como empleada del hotel en Medellín actúa como una figura maternal, ofreciéndoles un lugar para lamer sus heridas y una dirección para recibir el correo.
Una secuencia temprana en un burdel rural muestra a los niños cada uno en un apretado abrazo con una de las trabajadoras sexuales de mediana edad, muchos de los cuales perdieron a sus hijos por la guerra. En ese caso, representan por el uno al otro una cura momentánea para sus respectivos vacíos. Jugando con sonido y su ausencia, Mora hace que este encuentro sea una experiencia casi fuera del cuerpo. El tiempo parece disminuir, permitiendo un respiro de las secuencias frenéticas de sus actos temerosos en la carretera que el director de fotografía David Gallego captura hábilmente.
Más tarde, un anciano, hizo que se sintiera marginado ya que sobrevive solo en los márgenes, alimenta y alberga a los viajeros adolescentes después de escapar de varios terratenientes del área que intentan secuestrarlos. Esos encuentros reponen los espíritus de los niños en medio de desnutrición y agotamiento físico, que a menudo luchan inhalando solventes o píldoras. Mientras Mora exalta su efervescencia infantil, las horribles verdades de su condición alcanzaron su punto máximo.
A lo largo de su agotadora odisea, Gallego encuentra muchas imágenes sorprendentes concebidas en parte de las interacciones del grupo con la imponente belleza natural en cuestión desde Medellín hasta la ciudad de Nechí en el norte de Colombia. Sin embargo, a veces, los marcos más abrasadores provienen de la calle callejera de los niños. Tomemos, por ejemplo, un momento temprano cuando arrojan rocas a las farolas en el camino hasta que se quedan en completa oscuridad. Arrastrando sus machetes sobre el asfalto, crean chispas que iluminan brevemente la noche. Mora ha explicado que el disparo no fue planeado, sino una reacción espontánea por parte de sus actores.
Junto con la narración de voz en off de Rá que anhela una realidad en la que él y sus amigos pueden vivir libres de juicio, las sensibilidades individuales de Mora permanecen presentes a lo largo de la prueba a través del caballo blanco que los guía repetidamente. Tal otro mundo incluso impregna un estallido de exuberancia juvenil con la melodía de "Tren Al Sur", una clásica canción de rock en español. Pero a pesar de toda la bondad dentro de ellos, hay el doble de la furia en sus ojos contra un mundo que los deshumaniza a cada paso, lo que hace que Nano sea un niño negro también denota que, incluso dentro de su marginación colectiva, todavía enfrenta un mayor maltrato. En general, la visión de Mora es extraordinaria para su humanismo militante.
Hay algo problemático sobre cómo "los reyes del mundo" podrían compartir lamentablemente el destino de anonimato y subapreciación de sus protagonistas. Lanzado a principios de este mes en Netflix sin fanfarria, es probable que esté destinado a perderse en las formas implacables del algoritmo, ya que trata de tallar un lugar en un paisaje sobresaturado. Deje que esta sea su señal para evitar que eso suceda.
Grado: A-
"The Kings of the World" ganó el primer premio en el Festival de Cine de San Sebastián 2022 y ahora está transmitiendo en Netflix.